Peralta-Azkoien: Arga

Egun Azkoiengo blog berria aurkeztu nahi dizuet:
Hoy quiero presentaros un nuevo blog de Peralta:

faunayfloradepera.blogspot.com.

Otsailaren 2an karrikaraturiko artikulua kasu:
Por ejemplo, el artículo publicado el 2 de febrero:



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 Rincones de Peralta. El río.

Arco del puente.

Desde que tengo recuerdos, el río está presente en mi vida, crecí junto a él...
Aún recuerdo esas tardes de primavera, que pasábamos pescando junto al puente, entre sus arcos y a la sombra de algún chopo que crecía a sus pies. Madrillas y algún barbo era el tributo que nos pagaba por pasar la tarde junto a él.
A sus pies, el río, un plano mas bajo que el puente, pero este se yergue, imponente, apoyando los pies en él.

Vista del río desde el puente.

.En verano nos daba el abrazo fresco que necesitábamos después de nuestras correrías por sus orillas. Bucar ranas y sacarlas de entre las raneras, era una de las muchas aficiones que nos ofrecía. Luego llevábamos esas ranas a casa y las metíamos en el barreño en el balcón, Por la noche se salían del barreño y... sorpresa!!! al día siguiente no estaban en el lugar que deberían estar... Y si a esto le añadiamos, que dos o tres días mas tarde, encontraban una muerte segura en algún rincón inaccesible de la cocina... nos lleva, seguramente, a uno de los recuerdos "mas agradables" de los de mi madre.
En sus orillas, disfrutábamos haciendo zapatillas con las piedras planas, tirándonos a sus aguas desde las ramas de algún chopo retorcido por la bravura de sus aguas primaverales y del deshielo de sus inicios, o simplemente dándonos un chapuzón para resarcirnos de la calor reinante.

Recodo del río.

Sus sotos, era su manera de agradecernos los enfados que solía tener en otoño y primavera.
Para mí, me parecían selvas impenetrables que seguro, escondían algún secreto en lo mas inaccesible de su corazón.

Soto De la Roza.

Sábados interminables, por sus recodos y orillas, buscando sus tesoros.

Embarcadero.

 Cangrejos , culebrillas de agua y algún lagarto, era todo lo que de su botín extraíamos, mientras tanto, nuestros padres, sobre todo el mío, preparaba un rancho  amparado a una buena sombra. Rancho, que por cierto, estaba exquisito!!!

Orilla del Arga.

Después de comer, llegaba la calma, y tumbado en una tolla, al pie de un  buen árbol, y mientras nuestros padres echaban la partida o charlaban de "sus cosas", debíamos guardar la digestión, un largo tiempo de espera, en el que debíamos dejar pasar el tiempo,

SIN HACER NADA!!!!

Cuando se levantaba la veda del baño, volvíamos a fundirnos en sus aguas, mientras los mosquitos empezaban a hacer su agosto. Pero, !qué mas daba un picotazo que otro!
Otro baño, la piel roja, No esteís mas al sol!!!!, jugar un rato a la sombra!!! si es que no me he traido la crema pa los hijos! oías comentar a tu madre y, por supuesto, las demás mamás apoyaban la moción, como si hubieran quedado de acuerdo de antemano...

Orilla del río.

Pues... a jugar de nuevo!!! este viaje buscando un bote para meter la culebra, ¿pasará algo si metemos la culebra junto con los cangrejos?, ¿quién se va a quedar con el botín para llevárselo a su casa?. Ya estaba el lío montado, ya los que hasta ahora eran tus mejores amigos, se convertían en una amenaza para tus intereses.

Panorámica del río y la peña, camino de Falces.

 La mejor solución, como no, confeccionada por nuestras madres, era tirar todo nuestro tesoro y dejarlo al desamparo de la noche en el soto!!
Años mas tarde comprendí, que de lo que estaban hartas era de que les lleváramos bichos a casa.
Ya tocaba recoger y volver de nuevo a casa, con tus amigos del barrio, el momento de fusión con la madre tierra había terminado, atrás quedaban los momentos de unión con el río, la tierra, la vida... Atrás quedan los momentos guardados en los rincones de tu memoria...

• Reflejo.